Adiós.

Esa palabra simpre me ha atormentado. No me gusta, suena a una despedida perpetua.
Yo no me despido de ti porque no volveré a marcharme, al menos no ahora. Ya una vez me fui, dejé a los míos y ahora no les haré lo mismo aunque probablemente sea lo que necesite, dormir... un año, dos, hasta que pueda sepultar ésto con todas sus flores.

He girado la cabeza y me doy cuenta de lo egoísta que he sido contigo.
No estoy seguro de si escribía para desahogarme o para acercarte a mi aún en contra de lo que tú consideras "mejor", es por eso que ésto será lo último que verás aquí, a menos que todo de un giro totalmente innesperado, pero tú y yo sabemos que no sucederá.

Te dije que al volver te diría qué sentía ahora por ti, si es menos, si es más débil.
Quisiera...

De mi parte tienes un sincero amor, un amor imperfecto pero con vida. Te amo.

El tiempo no me ayudó porque seguías vivo en mi mente y en mi corazón. Aunque no te tocara te pensaba tanto que llegaba a sentirte a mi lado.


No me lastimaste. Juntos nos hicimos daño, así que no te sientas culpable. En algún momento recuperaremos nuestra amistad,en verdad lo deseo y gracias por soportar todas éstas cosas de mi.

Éstas serán mis últimas letras... 

Adiós, Satoshi.